La subida de temperaturas hace que no solo suba nuestro ánimo, sino que los insectos proliferen más habitualmente que en otras épocas del año. El calor provoca la probabilidad de sufrir plagas en casa, pero ¿cómo saber si tenemos una plaga en casa?
A veces, no es necesario ver a los insectos pululando por nuestro hogar para saber si tenemos una plaga en nuestra casa. Hormigas, cucarachas, termitas, moscas, mosquitos… Existen algunos rastros que nos facilitarán saber si padecemos una plaga en nuestros hogares sin ni siquiera ver a los insectos.
Rastros de una plaga
- Excrementos. Los excrementos de los insectos suelen ser minúsculos, casi inapreciables. Pero son un síntoma de que podríamos estar ante una plaga en nuestros hogares. Las ratas, ratones, termitas… dejan un rastro más visible, como los excrementos de palomas (cuidado también con estos que son muy peligrosos para la salud); mientras que el de otros animales e insectos pueden ser menores. Por eso, es imprescindible la constante limpieza en nuestros hogares.
- Suciedad. Vigila que no queden restos de comidas, agua, etc. en tu hogar. Cierra bien las bolsas de basura, recoge los restos de pan o comida que hayan podido caer al suelo… Estos restos suelen ser un rastro para los insectos que acuden a ellos para alimentarse.
- Restos de agua. Si en tu casa o instalaciones existe algún lugar en el que el agua se quede estancada o haya fugas, vigílalo porque puede ser un foco de plagas. Es imprescindible acudir a expertos para solucionar estos problemas.
- Restos de materiales. Si encuentras serrín, o un material parecido, cerca de tus muebles puede que estés ante una plaga de termitas. Éstas pueden no dar síntomas graves y visibles hasta que es demasiado tarde, por ello es imprescindible estar atentos a rastros como estos.
Cuente con expertos en control de plagas
Al más mínimo síntoma de plaga (cucarachas, ratones, ratas, hormigas, termitas…) no juegue con su salud y cuente con expertos en el control de plagas. Es una inversión más que un gasto el que se realiza, ya que está en juego su salud. No olvide que toda precaución es poca pero, a veces, no podemos controlar la naturaleza y es por ello que es mejor contar con profesionales del control de plagas que empeorar la situación utilizando materiales y productos por nuestra cuenta.